domingo, 22 de mayo de 2011

Otra Presentación Exitosa

La presentación del libro Escritos Cercanos realizada el día viernes pasado fue todo un éxito. Otra actividad positiva de nuestra querida Sociedad de Escritoras y Escritores de la Argentina, Sede Santa Fe.

Los Autores de Escritos Cercanos son:
  • Silvia Barbotti
  • Norma Cáceres
  • Santina Canestraro
  • Beatriz Chiaraviglio
  • Pablo Dibernardi
  • Gabriel Heredia
  • Griselda Ruiz


A continuación compartiremos con Ustedes el texto realizado por Diego Maldini Freyre, leído en ocasión de la presentación del libro:

Presentación de Escritos Cercanos.

Buenas noches. Hablando con toda sinceridad, es un placer haber sido invitado a presentar esta recopilación de textos escritos aquí mismo, en esta -por fortuna- culturalmente incipiente ciudad de Santafé, y editados también en aquí, por nuestra editorial amiga: Ladran Sancho Ediciones. Y no lo siento así, sólo porque conozca en parte a los autores y sepa que merecen nuestro reconocimiento, sino porque ver concretadas este tipo de actividades culturales me llena de orgullo aunque no haya tomado parte en ellas. Un poco, es ése el espíritu que esta noche quiero compartir con ustedes, aprovechando su presencia.
Esta es la primera vez que presento un libro y no estoy dispuesto a hacer lo que critico en quienes presentan libros. ¿A qué me refiero? A la crítica literaria “literaria”, por decirlo de alguna manera... Por una parte, no considero demasiado apropiadas las interpretaciones empalagosas y voladoras -es decir, hiper-subjetivas- que quieren competir con los textos literarios que reseñan, con más literatura. Tampoco comparto (todo esto es a título personal, por supuesto) la imposición de interpretaciones en el ámbito del arte: sólo invito a que lean y descubran sus propias sensaciones. Para esto, tengo dos ejemplos opuestos; por un lado, las catas de vinos, en las cuales los expertos catan un vino y, casi poéticamente, se desenrollan media hora sobre los atributos del vino en cuestión. ¿Dónde terminan la precisión, la guía, y empiezan la dispersión y el subjetivismo? El otro ejemplo es el siguiente: cuentan que en cierta ocasión, luego de terminar Schubert de ejecutar una nueva pieza para piano, una mujer le pregunta qué significaba dicha pieza. Schubert, reconocido compositor, no dice nada; por toda respuesta, regresa a su piano y vuelve a tocar la melodía. El sentimiento puro de la música era el sentido.
Sin ahondar en argumentos y justificaciones, para no extender más de lo debido mis digresiones, me limito entonces, a recomendar un libro que rebosa de cotidianidad, búsqueda y realismo, pero donde no van a falta la magia, la poesía, la sorpresa y hasta algunos pasajes con una clara y bien lograda influencia cinematográfica, como en las narrativa y la poésía de Norma. Entre las páginas de este libro, también encontraremos heterónimos, como el de Santina, que funciona a un tiempo como una puerta hacia la armonía, como una fotografía cuya única ambición es compartir gotitas de realidad y, por qué no, hasta como un llamado a consciencia, integrados bellamente con una simpleza abrumadora.
Podemos elogiar también, la velocidad de lectura que Beatriz logra con sus textos, que por otra parte, no hace mella en absoluto, en la capacidad de sorpresa y el suspenso que genera leerlos.
La poesía y las estampas regionales de Griselda, donde el romanticismo que más que en el objeto está en la mirada de su autora, se ven contrastadas con la crítica irónica y el costumbrismo de Gabriel, quien escribió uno de los relatos en los que me sentí como en casa. No faltan tampoco, en esta antología, la precisión casi austera de un relato compacto, simple, pero también místico y existencial, de Silvia; ni la puesta en evidencia del acto mismo de escritura, que Pablo integra hábilmente dentro de una narración con aires filosóficos, de la mano de un curioso interlocutor.
Todas ellas son, en sí mismas, muestras de cuánto vale la pena recorrer las páginas de Escritos Cercanos, pero más allá de los contenidos, y antes de terminar con la presentación, deseo remarcar la importancia que tiene que todos nosotros sostengamos el arte (y no solamente el arte literario, claro) concurriendo a eventos como este y apoyando a los artistas de la manera más lógica: consumiendo arte. Esto, dicho en el buen sentido, ese que tiene que ver con la entrega, la aceptación y, sobre todo, la nutrición.
Insto, también, a que nos acerquemos a las actividades culturales de una manera activa, como productores de arte nosotros mismos, y descubramos, así, la bondad del quehacer artístico desde el punto de vista creativo, introspectivo, catártico y revitalizante.
Beatriz, Gabriel, Griselda, Norma, Pablo, Santina y Silvia, todos destacan en algo, y se los nota más cómodos en un lado que en otro, gajes del oficio en esto que es aprendizaje, camino y meta final a un tiempo: La Escritura. En todos ellos se nota de manera poderosa lo enraizados que están el contexto social, el económico y el histórico, es decir, el lugar desde el cual se nos ofrecen. Pasión, cosmovisión, nostalgia, humor, costumbrismo, miradas hacia el pasado y hacia el futuro, se entrelazan en esta obra a la que sinceramente ya le he tomado cariño, pero si debo ponerle una etiqueta a este proyecto colectivo, no lo pienso demasiado: sin ningún esfuerzo emerge en mi cabeza la palabra “Naturalidad”, y el hecho de que así suceda, se debe precisamente al esfuerzo previo que ponen mis colegas en crecer como personas y como escritores, este empeño y esta naturalidad, hermanados, hace que sintamos a estos escritos, cercanos, muy cercanos.

¡Estén atentos, ya que a la brevedad, subiremos a este mismo espacio algunos textos seleccionados del libro Escritos Cercanos, como para calmarles la impaciencia hasta que se hagan de un ejemplar!

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